Finca Villacreces, desde sus inicios, se propuso respetar al máximo todo lo que la naturaleza le había dado. Tanto pinos centenarios, el río Duero, flora y fauna autóctona. Y todo este trabajo ha tenido su recompensa tras obtener el certificado Wineries for Climate Protection. Se trata del programa más importante impulsado por la Federación Española del Vino (FEV) y con un amplio reconocimiento internacional. Esta certificación reconoce a aquellas bodegas comprometidas con la sostenibilidad y la ecología.
Durante los últimos años han apostado por gestionar su viñedo ecológicamente y han trabajado para reducir su huella de carbono. Así es como han conseguido minimizar las emisiones de gases efecto invernadero (GEI), mejorar la gestión del agua, y reducir los residuos. Del mismo modo, se han esforzado en optimizar los recursos energéticos, así como en practicar una viticultura ecológica en sus propios viñedos.
Finca Villacreces es una de las 10 bodegas más visitadas de la Ribera del Duero y toda su actividad enoturística siempre ha estado diseñada para que se respetara el entorno que la rodea. Uno de sus principales atractivos es recorrer el viñedo en bicicletas eléctricas, una de las bodegas pioneras en llevar a cabo este tipo de eco-enoturismo.
Es así como se clasifican entre el reducido grupo de bodegas de la Ribera del Duero (sólo cinco certificadas) que han conseguido formar parte del programa. Este importante acontecimiento ratifica el respeto de Finca Villacreces por el medio ambiente, por el propio origen de su principal valor: su materia prima.
Para Lalo Antón, gerente de Villacreces, este certificado significa “un paso más en nuestro compromiso por un futuro mejor, por respetar lo que tenemos entre manos y que las generaciones futuras reciban un gran legado”.
