El restaurante KABUKI KŌMORI abrió sus puertas en Valencia en octubre de 2012, con la esencia de la cocina del Grupo Kabuki y su cocina japonesa inspirada en lo mediterráneo. Para ese camino contó desde el primer momento con el chef Andrés Pereda, formado en Grupo Kabuki y experto en aplicar técnicas japonesas a una cocina que respeta el producto por encima de todo.
Es por ello que su modo de hacer se ha convertido en sello de este restaurante que inicia ahora una nueva etapa con su cambio en sala y reforzando el sello Kabuki en la capital valenciana, ya que incorpora como director del restaurante a Hiromi Okura, que lleva 19 años en el grupo.
Originario de Chiba (Japón), se ha formado en Madrid en sumillería y en management de restaurantes en la Cámara de Comercio y es S.S.E. Sake sommelier (Tokio, 2012), formación que hace que esté ya trabajando en una nueva carta mucho más potente de sakes, manteniendo la filosofía de la carta actual con referencias nacionales e internacionales. Inició su trayectoria con el Grupo Kabuki en el 2001 como parte del equipo de sala de Kabuki de Presidente Carmona y a partir de 2007 se convirtió en assistant restaurant manager de Kabuki Wellington para ser después manager del restaurante Kabuki Raw, en Málaga, desde 2016 hasta la actualidad, cuando pasa a liderar el proyecto de KABUKI KŌMORI.
Además, el restaurante experimentará cambios importantes en su propuesta líquida. Cuenta para ello con Tara Hernández-Monzón, quien tras 4 años en Abama Kabuki, en Tenerife, acomete este nuevo proyecto para el que está preparando una selección de más de 250 referencias de champagne, vino, sake y jerez.
Esta nueva etapa no viene sino a reforzar en Valencia la esencia del Grupo Kabuki, con el chef Ricardo Sanz como director gastronómico, en este restaurante que mantendrá su esencia. Sus clientes no notarán cambios en su carta ni en su filosofía. Mantiene ubicación en el hotel The Westin Valencia, que ha apoyado desde el inicio el crecimiento del mismo.
